Dios odia a los pendejos buenos.
El cine siempre me ha parecido una gran ventana, en ella podemos atisbar al mundo de otras personas, espiar la vida ajena. Pero cuando un film se convierte en un espejo, ahí si entro en una especie de transe y trato de digerir el film. Eso me pasó con “Un hombre serio” el nuevo film de los hermanos Cohen, =mas=que cada vez me convencen para considerarlos en el puesto número 1, dentro de mi top 5 de directores favoritos de cine. La frase anterior me hace pensar si me estoy volviendo muy mamón y pedante, o solo la escribí para encabronar a algunos de mis lectores; no sé, tiene tanto tiempo que no escribo por estos rumbos que ya olvidé como escribir algo coherente, inocuo, humilde y digerible para las masas. Bueno, en realidad no importa, la finalidad de hacer este post, es para dejar constancia de que me gustó bastante esta película, que con humor negro intenta responder preguntas filosóficas sobre la vida: ¿Existe el destino? ¿Dios influye en nuestras vidas y nos manda las desgracias? ¿Ser serio y correcto te hace parecer pendejo? ¿Por qué a los buenos siempre les va mal y los
Hay 576 palabras más en este escrito, para seguir leyendo debe identificarse