[LIBROS GRATIS]
Los de las letras vivimos de noche, hacemos como que comemos y nunca dormimos=mas=. Si hay tiempo, hasta podemos dedicar unos minutos a revisar la correspondencia. No la contestamos, a no ser que se trate de algún posible candidato a mecenas. Sabemos perfectamente que un libro salido del domicilio, no regresa jamás. Que las tardes de café en mala compañía resultan peor que una mala cojida en la cama. No bebemos antes de la segunda hora de la mañana y procuramos algunas veces enamorarnos de alguien más que no sea de nosotros mismos. Por ningún motivo rechazamos la invitación al interior de una dama en conflicto. Ya sabemos que una oportunidad de ese tipo siempre trae como consecuencia, al menos a una devota. No está de más rodearse de seres, cuya sensibilidad se proyecta a través de generosas contribuciones. Y a mí, en lo particular, me agradan los viajes. Después de intercambiar ideas, con algunos intelectuales, recibí una cordial invitación. Fuimos a desmantelar el material que durante cinco décadas coleccionaba un abogado. Amigo de tantos años, y alcahuete de muchas de las correrías que
Hay 545 palabras más en este escrito, para seguir leyendo debe identificarse