Esa imperiosa necesidad.  =mas= Cuando llega el alba hemos recordado cosas tristes, felices, en resumen aquellas que dejan una línea bien definida entre ser y no ser, lo que nos lleva a adoptar cierto comportamiento en la vida diaria, bien estamos hechos de material flexible y tenemos que adaptarnos al ritmo de la rutina, trabajo, familia, amigos y porque no, diversión, quien cumple con los requisitos anteriores estoy casi seguro que lleva una vida cercana a lo normal a no ser por las exigencias mismas que nos hacen tener turnos de 12 horas o fines de semana de escasos minutos. Y no es una reclamación, menos seria un agradecimiento este texto escrito desde lo más podrido del corazón, ahí donde se guardan esos sentimientos que no podemos contarles a nuestros padres, a nuestra pareja ni a nuestro mejor amigo(a), decido llevar este pensamiento, esta decisión solamente para mí y que me sirva para no cometer los ochocientos mil errores que una y otra vez cometeré aun así sea el objetivo no volverlo hacer. Es ahí en ese momento donde se definen ciertas circunstancias, donde las palabras son necesarias, decirlas aun mas, la vida en si no tiene un propósito firme más que el de la autodestrucción, y bien existen cosas llamadas “hermosas” como el amor o fanatismos, me considero fan de estos últimos conceptos, vivir en un mundo donde es urgente el reciclaje tanto como el decir un “te quiero” en el momento adecuado o donde el hambre de “poder” de los gobernantes afectan la vida de millones, tenemos dos manos, un par de pies, el

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