Crónicas de una acusada
Ella sólo quería morirse. Estaba cansada de hacer daño a la gente, quisieralo o no. Como siempre, todas sus acciones tenían filo, un filo que cortaba la piel, literal y metafóricamente, de aquel a quien se acercaba. Porque ella nunca quiso hacer daño, ella sólo intentó “portarse bien” o permitirse la ilusión de “hacer amigos”. Qué estúpidamente equivocada estaba. Por un lado, la culpa la azotaba, pues hacía sufrir a la persona
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Me siento Triste.
Escuchando: Love said No - HIM