Es de mala educación leer la mente de las personas
En cierta ocasión estaba buscando una calle de difícil localización, después de guiarme por las referencias del lugar le pregunte a una persona por donde quedaba, la cual me dijo que=mas= iba en la dirección contraria y que estaba a unas calles de ahí. Dos cuadras después un señor al que le estaban boleando los zapatos me llamó ¡Joven!, pero no le hice caso en un principio, unos segundos después voltee y sin mediar palabras me dijo: Joven, la
Hay 234 palabras más en este escrito, para seguir leyendo debe identificarse